ELA y degeneración frontotemporal

El descubrimiento en 2011 de que la mutación del gen C9orf72 puede causar tanto FTD como esclerosis lateral amiotrófica (ELA) ha transformado una creencia arraigada desde hace mucho tiempo de que la ELA es "puramente" un trastorno del movimiento y que la FTD es "puramente" una forma cognitiva o conductual de demencia.

Ahora se reconoce que el C9orf72 El gen es el gen más común que causa DFT hereditaria, ELA y ELA con DFT. Ahora sabemos que varios otros genes también pueden causar ambas enfermedades. La DFT, o degeneración frontotemporal, es una enfermedad cerebral progresiva con cambios en el comportamiento, la personalidad y la disfunción del lenguaje debido a la pérdida de células nerviosas en los lóbulos frontal y temporal. La ELA es una enfermedad neurodegenerativa con pérdida de neuronas motoras superiores (ubicadas en el cerebro) e inferiores (ubicadas en la médula espinal) que conduce a parálisis, disfagia, disartria y, finalmente, insuficiencia respiratoria.

Describir el síndrome clínico en el que se producen DFT y ELA en la misma persona ha sido un área de investigación activa y nuestro conocimiento de la genética, la patología y las características clínicas subyacentes aún está en desarrollo. En la actualidad, la descripción más completa encontrada en la literatura de investigación se refiere a este complejo como ELA-Trastorno del espectro frontotemporal.

La comprensión actual de la ELA con déficit del lenguaje aún es incompleta. Tanto la variante agramática como la semántica sin fluidez de la afasia progresiva primaria se han informado en asociación con la ELA.

Conozca las señales... Conozca los síntomas

Síntomas de uno de los trastornos FTD (más comúnmente Síntomas de bvFTD) suelen notarse primero y los síntomas motores se identifican más tarde. Además de los cambios en el comportamiento, la personalidad y las habilidades lingüísticas que caracterizan a la FTD, las personas con ELA y FTD también tienen dificultad para caminar, pararse, usar las manos, hablar, tragar o respirar. Se ven afectados la médula espinal y los nervios fuera del sistema nervioso central (cerebro y médula espinal) que se comunican con los músculos, así como los lóbulos frontal y temporal. Los síntomas motores pueden incluir:

Debilidad muscular

Incapacidad progresiva para mover los brazos, las piernas, la cara, la lengua o el cuello. A menudo comienza en un lado del cuerpo y finalmente conduce a la parálisis. Ejemplos incluyen:

  • La debilidad en las piernas puede provocar tropezones y caídas.
  • Dificultad para agarrar un bolígrafo o una taza
  • Dificultad para levantar los brazos por encima de la cabeza.
  • Torpeza al realizar movimientos motores finos con las manos o los dedos (p. ej., los necesarios para escribir a máquina, abrocharse la camisa, escribir, etc.)
  • Respiración dificultosa

Atrofia muscular

La pérdida de tejido muscular.

fasciculaciones

Contracciones breves, espontáneas e incontroladas de los músculos.

espasticidad

Contracción prolongada e incontrolable de un músculo, que provoca tensión y rigidez.

disartria

Habla lenta y arrastrada, debido a la incapacidad de mover la boca y los músculos faciales.

disfagia

La incapacidad para tragar. Los síntomas incluyen babeo y ahogo con comida o saliva. Esto puede provocar desnutrición.

Diagnóstico

El trabajo más reciente sobre el diagnóstico de ELA (Strong, 2017) reconoce un amplio espectro de presentaciones de ELA. El espectro incluye ELA con síntomas motores únicamente, así como ELA con déficits conductuales o cognitivos que no son suficientes para cumplir con los criterios de diagnóstico de demencia. Y hay personas con ELA con síntomas conductuales o de lenguaje suficientes para ser definidas como ELA con degeneración frontotemporal. Si le preocupa que usted o un ser querido pueda estar experimentando una de estas afecciones, o cualquiera de los signos y síntomas enumerados anteriormente, es importante que consulte a un médico.

Tratamiento, manejo y qué esperar

No existe cura para la ELA o la FTD. Se ha demostrado que el riluzol, el primer fármaco aprobado para su uso en el tratamiento de la ELA, retarda la progresión de la ELA en algunos pacientes y aumenta la supervivencia. La rasagilina, desarrollada para la enfermedad de Parkinson, es un inhibidor de la monoaminooxidasa pero demuestra acción neuroprotectora. Se ha utilizado para tratar la ELA y, en un estudio controlado aleatorio reciente, parece aumentar la supervivencia. Otros medicamentos pueden ayudar a aliviar los síntomas de calambres musculares y espasticidad. En la actualidad, no existen medicamentos aprobados para la FTD. Se ha intentado el tratamiento sintomático con medicamentos desarrollados para otros trastornos, pero ha tenido un éxito limitado en los trastornos de degeneración frontotemporal.

Los pacientes con este diagnóstico suelen experimentar una rápida disminución de las capacidades físicas y cognitivas. El curso de la ELA con degeneración frontotemporal puede transcurrir tan rápidamente como de 2 a 3 años, a diferencia del curso de 5 a 10 años que se observa más comúnmente en otras formas de FTD.

La fisioterapia, incluidos ejercicios de estiramiento y ejercicios de bajo impacto, puede ayudar a aliviar los síntomas musculares. Dispositivos como rampas, aparatos ortopédicos, andadores y sillas de ruedas pueden ayudar a los pacientes a conservar energía y mantenerse móviles. La logopedia puede ayudar al paciente a desarrollar estrategias para hablar con mayor claridad. Con el tiempo, pueden resultar útiles medios alternativos de comunicación, como los sintetizadores de voz.

Las características de la ELA del trastorno eventualmente hacen que los pacientes sean incapaces de pararse, caminar, acostarse o levantarse de la cama por sí solos o usar las manos y los brazos. La dificultad para tragar y masticar afecta la capacidad del paciente para comer normalmente y aumenta el riesgo de asfixia. Los pacientes eventualmente pierden la capacidad de respirar por sí solos y necesitarán asistencia respiratoria para sobrevivir.

Es importante que los cuidadores y las familias piensen en cuestiones de gestión a largo plazo e identifiquen un equipo de expertos que puedan ayudar con los difíciles desafíos médicos, financieros y emocionales. Es imperativo contar con un médico que tenga conocimientos sobre ELA y FTD y los enfoques de tratamiento. Otros especialistas médicos que pueden ser útiles incluyen: logopedas, fisioterapeutas y ocupacionales, neuropsicólogos, enfermeras (especialmente enfermería de atención domiciliaria) y asesores genéticos.

Genética

Hasta la mitad de las personas diagnosticadas con ELA exhiben cambios de comportamiento o una disminución en las habilidades del lenguaje similares a los observados en la variante conductual de la DFT o la afasia primaria progresiva. Por el contrario, hasta el 30% de las personas diagnosticadas con FTD desarrollan síntomas motores compatibles con la ELA.

Esta superposición es lo que llevó a los expertos a proponer que la DFT y la ELA pertenecen a un espectro de enfermedades común, especialmente a la luz del reciente descubrimiento de que la mutación del C9orf72 El gen es la causa genética más común de ambos trastornos. El C9orf72 La mutación genética produce una expansión de un área del gen que consta de seis nucleótidos, llamada repetición de hexanucleótido de GGGGCC. Los portadores de esta expansión genética pueden tener de cientos a miles de repeticiones del hexanucleótido en comparación con 30 o menos en alguien sin C9orf72ELA o FTD relacionados. Se ha demostrado que una pequeña cantidad de genes raros desempeñan un papel en la ELA hereditaria con degeneración frontotemporal. Estos son PCV, SQSTMIUBQLN2 y CHMP2B.

Patología

En la mayoría de los casos, la ELA con degeneración frontotemporal se asocia con una acumulación anormal de la proteína TDP-43. En una minoría de personas se encuentran acumulaciones de la proteína fusionada en el sarcoma (FUS).

Referencias

Strong, MJ, Abrahams, S., Goldstein, LH et al. Esclerosis lateral amiotrófica – trastorno del espectro frontotemporal (ELA-FTSD): criterios de diagnóstico revisados. Esclerosis Lateral Amiotrófica Degeneración Frontotemporal. Mayo de 2017.

Ng, ASL, Rademakers, R. y Miller, BL Demencia frontotemporal: un puente entre la demencia y la enfermedad neuromuscular. Ann NY Acad Ciencias. Marzo de 2015.

Ji, AL., Zhang, WW., Huang, WJ. Conocimiento genético del espectro de esclerosis lateral amiotrófica / demencia frontotemporal. J. Med. Gineta. Marzo de 2017.

Saxon, JA, Thompson, JC, Jones, M. et al. Examinar el lenguaje y el perfil de comportamiento en FTD y ALS-FTD. J. Neurol. Neurocirugía. Psiquiatría. Junio de 2017.